Una guía para el descubrimiento personal y la comunicación en pareja
La sexualidad es un aspecto fundamental de nuestra vida, pero a menudo viene acompañada de inseguridades y dudas. ¿Te has preguntado con quién compartir cuando buscas perspectiva sobre tu sexualidad? Aquí te ofrezco una reflexión y algunos consejos prácticos para navegar estos momentos con confianza y apertura.
Entendiendo las Inseguridades Comunes
- Para Mujeres: Puede que te sientas excitada, pero físicamente no estés preparada para la penetración. Esta desconexión entre el deseo y la respuesta física es normal.
- Para Hombres: Regular la excitación o sincronizarse con el ritmo de la pareja puede ser un desafío. Es importante reconocer que estos son escenarios comunes y naturales.
La Sabiduría de Nuestros Cuerpos
Nuestros cuerpos a menudo nos comunican mensajes importantes a través de estas reacciones. En lugar de ignorarlos, te invito a explorar y entender qué nos están diciendo.
Estrategias para Reconectar
Contacto Personal: Tómate un momento para conectar contigo mismo. Reduce la velocidad, respira profundamente y siente. Pregúntate: ¿Qué necesitan mis genitales? Explora tus necesidades desde una perspectiva de curiosidad y cuidado propio.
Contacto con tu Pareja: La comunicación abierta es clave. Exprésale a tu pareja lo que necesitas, pregunta cómo se siente y comparte tus propios sentimientos. La confianza y la risa compartida pueden transformar la experiencia sexual.
Reconceptualizando la Sexualidad
Nos han enseñado que la sexualidad se trata de hacer, de crear excitación y alcanzar el clímax. Sin embargo, existe otra manera de vivir la sexualidad: desde el disfrute y la conexión con nuestro cuerpo. Al enfocarnos en sentir en lugar de hacer, las presiones y expectativas desaparecen, permitiendo que la intimidad fluya de manera más natural y satisfactoria.
Conclusión: Hacia una Sexualidad más Auténtica y Satisfactoria
Nos han enseñado que la sexualidad se trata de hacer, de crear excitación y alcanzar el clímax.
Otra posibilidad es pasear con ella siguiendo nuestro cuerpo, desde un lugar de disfrute, cuando sientes y disfrutas, se esfuman las presiones, ni expectativas. Aprender a sentir, a escuchar las sutiles corrientes que se entrelazan entre un pene y una vagina relajados.
Te darás cuenta que no es haciendo, sino sintiendo y despertando el magnetismo de tu cuerpo, que accedes a una sexualidad que te aporta seguridad y placer compartido.
Conectarte con tus genitales te ayudará a sentir más y por tanto la intimidad con tu amante será más fluida y fácil.